Glosario de Términos

También conocida como percalina, la lustrina es un tejido de algodón que imita de forma sencilla el material que antiguamente se elaboraba en seda. Se confecciona con ligamento tafetán y se caracteriza por estar teñido, muy aprestado y fuertemente cilindrado, lo que le otorga una apariencia particular: una cara mate y la otra brillante.
Características:
- Material: algodón, aunque en sus inicios se producía con seda.
- Ligamento: tafetán, que aporta un acabado liso y estructurado.
- Acabado: aprestado y cilindrado para conseguir el contraste entre mate y brillo en las caras del tejido.
- Apariencia: rígida debido al apresto, con una superficie brillante que le da un toque decorativo y funcional.
Usos:
- Forrería: utilizado como forro en ropa, bolsos y otros accesorios, debido a su estructura firme y elegante.
- Fantasía y adornos: empleado en la confección de detalles decorativos, como lazos o aplicaciones en prendas.
- Decoración: elementos decorativos que requieren una combinación de ligereza y rigidez, como pantallas de lámparas o fundas.

Historia y evolución:
Originalmente confeccionada en seda, la lustrina evolucionó para adaptarse a materiales más económicos como el algodón, manteniendo sus características distintivas. Fue especialmente popular durante el siglo XIX y principios del XX como una opción asequible para aplicaciones donde se deseaba un acabado sofisticado.
Propiedades y cuidados:

- Durabilidad: resistente, pero el apresto puede deteriorarse con el tiempo o con lavados frecuentes.
- Cuidado: limpieza en seco recomendada para preservar el acabado.
La lustrina, con su combinación de practicidad y estética, sigue siendo apreciada en aplicaciones específicas como forros y adornos, aunque su uso ha disminuido en favor de materiales más modernos.